Abner Pérez
Con fervor religioso, cultura y alegría popular, las familias capitalinas participaron del inicio de las fiestas 
tradicionales en honor a Santo Domingo de Guzmán, Patrono de los Managuas, desarrolladas en un ambiente de orden y seguridad, gracias al acompañamiento de las fuerzas policiales.
“Estamos trabajando de forma interinstitucional para que las familias disfruten en paz sus fiestas, las fiestas tradicionales de Managua”, mencionó la compañera Reyna Rueda, alcaldesa de Managua.
Baile de las Vacas Culonas
El tradicional baile de las Vacas Culonas llenó las calles del barrio San José Oriental, desatando sonrisas, aplausos y entusiasmo en las familias. Estas representaciones, llena creatividad, son parte del folklore popular que acompaña la festividad religiosa.
Vela del Barco
El barrio San Judas se vistió de colorido y devoción con una de las tradiciones más emblemáticas de las fiestas patronales, donde los devotos acompañan la imagen del barco decorado con flores, frutas y mucho color, representando el viaje espiritual y milagroso del santo.
“El ambiente es muy bonito y me gusta andar en la procesión para alegrarme un poco con la gente y bailarle al santo. La Policía está siempre presente en cada una de las actividades”, expresó la señora Kimberlin Centeno, devota de Santo Domingo.
Palo Lucio
Un año más las familias capitalinas se unieron para vivir con entusiasmo y algarabía popular, el tradicional Palo Lucio, tradición que enmarca el reto de escalar un poste cubierto de grasa, donde el participante que llegue hasta la cima gana premios especiales.
“El ambiente está muy bueno, todo sano, vine a recrearme con mis hijos. El trabajo de la Policía es excelente porque nos están resguardando a las personas que venimos”, manifestó la capitalina Soviet Montiel.
Así, Managua reafirma su devoción, su identidad y tradición de vivir sus fiestas patronales en un ambiente de paz, orden y seguridad, gracias al trabajo incansable que ejecuta la Institución Policial, junto a las instituciones de nuestro Buen Gobierno y la comunidad.
¡Viva Santo Domingo de Guzmán!
